El pueblo de Cataluña está inmerso en un interesante debate sobre la necesidad de contar con un Estado propio. La riqueza del debate radica en el hecho de que los argumentos, en un sentido u otro, queden claramente expuestos. En este sentido, el marco europeo condiciona claramente el debate y refuerza determinados argumentos. La construcción de una Europa unida en la diversidad incluye el derecho a decidir de los países que la integran.

La Fiesta Nacional de Cataluña de este año se espera masiva, una ocasión para comunicar a Europa y al mundo que los ciudadanos de Cataluña quieren poder decidir libremente su futuro colectivo, de manera democrática, tranquila y ordenada. Dando la palabra a la ciudadanía es como se solucionan los conflictos en la Europa del siglo XXI.

En este sentido, Horitzó Europa hace un llamamiento a los ciudadanos de Cataluña a defender el derecho del pueblo catalán a decidir su futuro colectivo en el marco de su compromiso con los valores de Europa: la democracia, la libertad y el respeto a la diversidad.

En otras palabras, la defensa del derecho a decidir es también una reivindicación europeísta. A diferencia de muchos otros movimientos políticos, el proceso catalán es un proceso civil abierto, inclusivo y democrático. Es importante, pues, lanzar a Europa y al mundo un mensaje a favor de la confraternidad de los pueblos del continente, a destacar que lo que está pasando en Cataluña es relevante para los principios básicos de la construcción europea. La Unión Europea no pasa por sus mejores momentos y todo indica que debe reforzar su legitimidad democrática.

Cataluña ha sido siempre la punta de lanza del europeísmo en la Península Ibérica, un territorio que se ha esforzado en conservar su identidad en la diversidad de culturas y lenguas de Europa. Asimismo, este país ha demostrado constantemente su compromiso con los retos globales que afronta Europa y con un mundo más justo, pacífico y sostenible. Estos grandes activos de país, que no son tan habituales como pensamos, debemos hacerlos valer el próximo 11 de septiembre, cuando el mundo volverá a mirarnos con atención. Hay que transmitir claramente que el catalanismo no es un movimiento excluyente ni reaccionario, como a veces se quiere hacer ver al mundo.

Por todo ello, Horitzó Europa anima a los ciudadanos de Cataluña a exhibir banderas europeas durante la Diada. El círculo de doce estrellas amarillas sobre el fondo azul identifica todo el continente (y no sólo la UE) y es un claro mensaje de amistad y fraternidad hacia el resto de pueblos de Europa. En definitiva, la bandera europea es la que mejor expresa el carácter civil, abierto, inclusivo y democrático de las reivindicaciones catalanes.