De nuevo el euro. Manifiesto en motivo del Día de Europa

La Unión Europea nació como un marco de pacificación y gestión de conflictos y como embrión económico y monetario. Si bien ya hemos alcanzado el primer objetivo, el segundo, después de 50 años de mercado común, se ve amenazado por los efectos de una de las crisis financieras más acusadas de nuestra historia.

La ironía es que ahora, cuándo tocaría hablar de proyectos políticos y sociales, en un momento que ya somos más de 501 millones de europeos de 27 estados miembros, y cuando parece que el Tratado de Lisboa abre las puertas a un nuevo marco institucional, nos tenemos que centrar de nuevo en la defensa del euro y de la unión básica sobre la cual se construyó todo el entramado europeo.

La crisis afecta a los estados europeos, como afecta otros países y economías, pero les afectaría todavía más de no estar integrados en el marco institucional de la UE. La crisis es, en el fondo, una excusa para los detractores del proyecto europeo, que renacen con más fuerza en un momento delicado por Europa.

La defensa del euro va más allá de los intereses convergentes de diferentes países europeos; responde a la visión y necesidad de una política económica conjunta que constituya los cimientos de una convergencia social y política, que permita una verdadera coordinación y colaboración para alcanzar una Europa fuerte, solidaria, activa y abierta.

Ante de todo el anterior, la Red de Entidades Europeístas de Cataluña manifiesta que:

  1. El Euro, a pesar de ser joven, es una moneda sólida y fuerte y no hay que olvidar los beneficios que ha comportado su adopción como por ejemplo, la desaparición de las incertidumbres asociadas a la volatilidad del tipo de cambio, la eliminación de los costes de transacción, la transparencia de precios en el mercado interior, la integración de los mercados financieros, moneda de reserva, el establecimiento del euro como actor global, etc. El lado más negativo de la balanza se refiere a la presencia de choques asimétricos entre países, mucho más difíciles de solucionar al no poder usar políticas como la flexibilización de precios y salarios.
  2. La crisis económica mundial ha puesto sobre la mesa las dificultades estructurales de la eurozona, que unifica países como Alemania y Francia, Grecia y Portugal, con la misma política monetaria pero diferente política fiscal. Fortalecer esta última dimensión, reforzando el fondo común e incentivando las economías más débiles, como la griega, la cual tiene una deuda pública que supera su PIB, se vuelve necesaria para la estabilidad del conjunto de la UE.
  3. Europa necesita definir una nueva estrategia económica basada en el concepto de economía social establecido por el Tratado de Lisboa. La crisis económica ha puesto de manifiesto que la Unión Europea necesita reformas estructurales de manera urgente. Hay que fortalecer una economía basada en el conocimiento, la eficiencia y la innovación.
  4. Las cifras actuales de desempleo en la Unión Europea llegan al 10% en la zona euro y al 9,6% en los veintisiete. Los datos son los más altos registrados en los últimos 10 años. El desempleo es uno de los problemas más graves a corregir y que requiere una correlación entre políticas sociales y políticas económicas; hay que proteger a los parados pero también fomentar la actividad económica con facilidades administrativas y fiscales para la creación de nuevas empresas.
  5. El 2010 es el año europeo de la lucha contra la pobreza y la exclusión social. El objetivo prioritario se dirige a reducir el porcentaje de europeos (un 17%) que no pueden cubrir sus necesidades diarias más básicas. Hay que hacer visible esta realidad, ya que queda a menudo eclipsada por la idea de que Europa es una de las regiones más ricas del mundo.
  6. Apostamos por una modelo de economía sostenible respetuoso con el medio ambiente y que incorpore las exigencias de la reconversión energética, con el fin de reducir las emisiones de CO2.
  7. Damos nuestro apoyo a la Estrategia Europea 2020 y a las 40 propuestas de futuro de la Unión Europea propuestas por el Grupo Catalán de Reflexión sobre el futuro de la Unión Europea.

Barcelona, 9 de mayo de 2010

Fundació Catalunya Europa
Associació de Diplomats de la Unió Europea (ADICEC)
Associació de Periodistes Europeus de Catalunya (APEC)
Horitzó Europa
Joventut Europea Federalista de Catalunya (JEF-UEF)